18/12/09

TARDE PARA EL CHOCOLATE CON LECHE

Sí le voy a decir mirándola fijo a los ojos eso fue lo que me contó Ernesto que te vio te vio te vio parada junto a Mario la otra tarde y que se miraban como cuando uno mira a otro después que pasa algo importante que no estaban de la mano ni nada como me enseñó mi padre que así se debe tratar a las mujeres y que así fue que enamoró a mi madre cuando solían ir a la matiné a ver dos o tres películas de la era dorada de Hollywood y que mi padre dice que se sentía el Marlon Brando y se tragaba sus lágrimas mientras mi madre lloriqueaba con cara de Ingrid Bergman así que mientras Ernesto me lo contaba yo sabía bien de lo que estaba hablando y enseguida se me vino la imagen a la cabeza

y me mordí los labios con fuerza mientras le decía te habrá parecido nene ellos son buenos amigos nomás hoy con Mariquita cumplimos un mes y cuatro días y estamos muy bien sí yo sé que es mentira porque él se quedó con rabia desde la vez que yo le conté que estaba de novio con vos y medio que se río y yo le dije sos un envidioso y él me dijo de qué te voy a tener envidia muerto y después yo le metí un planchazo jugando al fútbol el día del asado que hizo el padre de Julián porque habíamos salido campeones con un solo gol en contra y yo estuve a punto de ser goleador ¿goleador? Me vas a preguntar y yo aprovecharía para mostrarte la foto de la copa que tengo pegada en la pared de mi cuarto sólo te lo quiero contar para que veas qué tipo de persona es este pibe que no puede ver a dos personas felices juntas que ya tiene que meter bronca sí ya sé mi amor me vas a decir y me vas a tomar de la mano y se me va a quedar impregnado tu olor mirá me huelo las manos y todavía me siento tu perfume por más que hace cuatro días que no te veo pero primero te voy a hacer pasar porque mi mamá hizo chocolate con leche mmmm qué rico olor vas a decir y yo compré las galletitas manón que tanto te gustan las que se te deshacen en la boca y también hay dulce de leche por si querés ponerles un poco y es mi novia mamá y hoy va a venir a casa porque le hice una carta y la invité a tomar la leche aprovechando que es feriado vas a ver qué linda que es y le pedí a mamá que pusiera el mejor mantel el de las florcitas pero acá no le voy a decir ni una palabra de nada acá no porque la voy a invitar para ir hasta el parque aprovechando que hoy salió el sol y ya no llueve como ayer que como dice mi abuela cayeron sapos de punta y me causa mucha gracia porque me imagino sapos con cara asustada cayendo desde el cielo con las patitas desplegadas como una especie de lluvia verde y rugosa leí en una billiken que de verdad a veces caen bichos desde el cielo como peces o sapos y es porque un ciclón los levanta del agua y los lleva hasta las nubes y después caen por ahí todos juntos en forma de lluvia viva yo sé que los sapos le dan un poquito de asco así que voy a tratar de no hacer este comentario porque no vaya a ser que se ponga mal y no quiera tomar la leche que preparó mamá y después la voy a llevar para que vea los patos en el laguito que hay en el parque y voy a tener mucho cuidado de que no se ensucie con barro los zapatos tan preciosos que usa siempre los del lacito que brillan mucho y ahí cuando estemos sentados en el banquito de madera que seguro ya debe de estar seco porque allí siempre da el sol ahí va a ser cuando la mire fijo a los ojos tan lindos y oscuros y brillantes que tiene y le cuente lo que me dijo el envidioso ese de Ernesto sí le voy a decir mirándola fijo a los ojos eso fue lo que me contó Ernesto que te vio te vio te vio parada junto a Mario la otra tarde y que se miraban como cuando uno mira a otro después que pasa algo importante que no estaban de la mano ni nada pero no sé porqué demorás tanto hace mucho que miro por la ventana y veo como el sol se va escondiendo y el naranja del cielo ahora ya es púrpura púrpura es el color al lado del violeta que tiene un poco de rojo y yo lo hago sacándole un poquito de punta al lápiz de color y el polvillo lo froto con un algodón y el papel agarra ese tono que justo tiene el cielo ahora y el vapor de mi respiración va empañando la ventana de a poco y hace desaparecer y aparecer el corazón que dibujé con el dedo en el vidrio como si latiera en silencio ya no veo para afuera sino que ahora me veo como un fantasma que me mira mientras esa lagrimita idiota se me cae por la mejilla y mamá me dice que ya es tarde para el chocolate con leche que sino no voy a comer la comida y la lagrimita me hace cosquillas y me la seco y me huelo mi mano con el perfume de Mariquita Mariquita Mariquita Mariquita Mariquita que seguro que ahora debe de estar con Mario de la mano sentados en mi banquito del parque mirando a nuestros patos con sus ojos tan lindos y oscuros y brillantes que tiene

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27/9/09

NADIE ME ECHÓ, VALOR. ARRANQUÉ SOLO.

Nací en Montevideo, Uruguay. A mil cien kilómetros de la ciudad de Córdoba. Montevideo tiene playas. Córdoba tiene sierras. Agua por tierra, un cambio radical.
A lo largo de estos años, las diversas ciudades se redujeron a dos conceptos: allá y acá.

Arranqué de allá a principios del ´99. Jugué varios años a trabajar en un supermercado y el teatro era un hobby de ratos libres que comenzó hacerme llegar a mis ocho horas sin dormir.
Paternidad, matrimonio y divorcio, en ese orden, se me sumaban al curriculum.
Salgo por primera vez de mi ciudad natal a un encuentro teatral en Santa Fe con mi grupo Bacalao. Ese viaje iniciático culmina en un romance espontáneo entre tutucas y noche bajo cielo estrellado.
Allí, llega sin aviso de devolución la postal de una ciudad al borde de las sierras y un horizonte no muy lejano, a apenas dieciséis breves horas de bus.
Puede decirse que llego acá en busca del amor.
Caigo en plena explosión teatral independiente y todo se vuelve más bueno que el dulce de leche Conaprole. Llevado de la mano por una ciudad desconocida.
Le pego parejo: estatua casi viviente, promo adentro de un conejo de pascuas derretido, semáforo en verde, mimo hablador, teatro de contenido diverso y etcéteras.
Y en el paquete turístico, personas que abren puertas y reciben y abrazan y dan, amigos, hermanos y hermanas nuevas, salas, instituciones.
El candombe hizo madera con el cuarteto.

Acá: “¿Sos de Uruguay? ¡Qué lindo que es Rocha!”
Allá: ¿Estás en Córdoba? ¿Siempre en lo tuyo?”

Caí en cuenta de que era inmigrante cuando me pidieron visa un verano que fui para allá. Para mí, valor, ser inmigrante era un barco lleno de gente con sombreros y valijas de cartón. Migraciones era una oficina con un ventilador girando lento y gente pidiendo asilo.
Pero también era yo, con mi bolso lleno de libros y una hija que crece sin que la vea por las mañanas.
Durante estos años tuve que ponerle actualizar a la barra de Internet y cambiar varios términos por otros para hacerme entender:
Championes por zapatillas
Boniato por batata
Golero por arquero
Chiquilines por chicos
Bizcochos por facturas
Palilllos por broches
Refuerzo por sánguche
Ómnibus por colectivo
Insultos surtidos por culeáu

¿Inmigrante? ¡Pero si yo nunca me fui de allá!

No te olvides del pago/si te vas pa´ la ciudad/cuanti más lejos te vayas/más te tenés que acordar/, canta Zitarrosa con su estampa de crooner folklórico.
Fuá, ´vo…


Artículo publicado en revista del CCEC, mayo, Córdoba, 2009

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